Sigue Jiménez en plan goleador

El Wolverhampton sigue con su buena racha y gran parte es gracias a las actuaciones de Raúl Alonso Jiménez. El mexicano corre, pelea, asiste y anota. Los Wolves son un equipo con él y otro muy diferente sin él. Saben que necesitan de los aullidos del mexicano y se vio demostrado en su visita a Goodison Park.
El Everton le hizo los honores al Wolverhampton en una lucha directa por el séptimo peldaño de la clasificación. Desde un inicio se demostró la paridad de las escuadras situadas en las posiciones 8 y 7 de la tabla.
La diferencia vino con una pena máxima. Leighton Baines, un veterano Toffee, cometió un error de novato y provocó el penalti con el que Ruben Neves abrió el marcador al minuto 7. El error de Baines y el gol tempranero fueron las primeras sorpresas de la tarde.
El empate fue aun más sorpresivo. André Gomes se estrenó en la Premier League y volvió a anotar tras 647 días. Eso sí, fue un auténtico golazo. Creó la jugada desde atrás del ecuador del campo, abrió hacia Tosun y ya en las entrañas del área fusiló a Rui Patrício.
Tres sorpresas en menos de media hora de partido auguraba más hechos inusitados. Cuando todos esperaban el empate para ir al descanso, una falta infantil al borde del área le abrió la puerta a los Wolves.
¿Y quién más podría aparecer? Raúl Jiménez peinó el esférico, tras el centro de Moutinho, anidó el balón en las redes locales. El amuleto de los Wolves aparecía para romper el maleficio del empate y darle claridad a la supremacía del Wolverhampton.
El segundo tiempo se convirtió en una lucha en el medio campo. Las acciones en las áreas se minimizaron y, por consiguiente, las emociones en el partido.
Este ambiente tranquilo dio la pauta para una sorpresa más. Un gato negro,enjuiciado por la creencia popular invadió el terreno de juego. El felino se paseó durante un par de minutos por la grama de Goodison Park para incrementar el nerviosismo de los supersticiosos.
No obstante, el Wolverhampton no se preocupó. Los Wolves siguieron el plan que tenían para afrontar este partido y, de la mano de su amuleto, caminó hacia el triunfo. Los tres puntos terminaron del lado del equipo de Jiménez gracias al gol de Leander Dendoncker.
Los Wolves estaban cazando a su rival y en un contragolpe, Dendoncker dio la mordida final para que el Wolverhampton sumara su triunfo número 11 de la temporada y se mantenga cerca del Manchester United, ubicado en la sexta posición de la tabla general.
Las sorpresas, la mala suerte y los augurios se le resbalaron al Wolverhampton.Liderados por su amuleto, el Lobo de la Premier League camina en un torneo donde empieza a ser un rival de respeto.