TAREA POLÍTICA
NUEVO ARREGLO
El consensuado por el patrón, Gobierno del Estado; sus contrapartes el Sindicato de Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado (STSGE) y la Sección 39 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE); y la LVIII Legislatura del Congreso Local, que se concretó en un nuevo proyecto de Ley de Pensiones del Estado de Colima que, como se colige de las declaraciones de los involucrados en el complicado tema, dejó a todos felices y contentos.
“Hemos construido acuerdos a partir de propuestas de un diálogo propositivo que ha generado certeza jurídica a los trabajadores porque los derechos laborales están intocados”, sentenció Martín Flores Castañeda, cabeza de STSGE, mientras que Heriberto Valladares Ochoa, líder del SNTE 39, dejó en claro que se hizo lo posible para que “la propuesta fuera viable financieramente sin lesionar los derechos adquiridos de los trabajadores”, gremio que según su decir tiene la inquietud sobre lo que sucederá con los trabajadores que están en trámite de jubilación o a punto de iniciarlo, “porque el Poder Legislativo ya no aprobará las pensiones y jubilaciones”.
Si, como afirma Flores Castañeda, fueron atendidos el 98 por ciento de los planteamientos hechos por el Sindicato que él lidera, “gracias a la apertura del Poder Legislativo y del Gobierno del Estado”, más que complacido debe sentirse. Además, él está contento porque hay certeza en la entrada en vigor de la ley que se plantea sea a partir del 1 de enero de 2019, y en los derechos adquiridos, aunque se siente un tanto intranquilo porque donde no la hay “es en la reforma constitucional, pues hay una laguna respecto a quién concederá las pensiones, si el Legislativo o el Instituto de Pensiones, durante el tiempo que transcurra entre la aprobación de la Ley y la fecha en que entre en vigor”.
Funcionario estatal clave en el bien llevado proceso que culminó exitosamente en el nuevo proyecto de Ley de Pensiones del Estado de Colima fue el Secretario de Administración y Gestión Pública del Gobierno del Estado, Kristian Meiners Tovar, para quien “la propuesta consensuada logra la viabilidad financiera que tanto desean los colimenses, para garantizar las pensionados actuales y futuras”. Bien por él al agradecer la disposición de los líderes sindicales Martín Flores Castañeda y Heriberto Valladares Ochoa por la mucha apertura que mostraron “para encontrar soluciones, por eso estamos contentos por haber llegado a acuerdos para proceder de la manera como Congreso juzgue adecuado, pero preservando los derechos de los trabajadores y que el gobierno tenga la viabilidad de las pensiones”.
Con la Nueva Ley de Pensiones del Estado de Colima que entrará en vigor el próximo año, es de esperarse que los sobresaltos financieros de la administración estatal y las inconformidades laborales disminuyan al grado de que tanto la salud de las finanzas de los patrones como la seguridad de que los derechos ganados por los trabajadores les serán cumplidos a cabalidad, se vean fortalecidas. Salud financiera y armonía laboral deberán garantizar en los próximos años mejores resultados del gobierno para los colimenses que tienen derecho a vivir felices y seguros. ¿O no?
El nuevo arreglo establece mayores aportaciones porcentuales de los integrantes del Fondo de Pensiones, la elevación a 65 años como edad mínima para aspirar al descanso todo pagado, el reconocimiento de la deuda acumulada que con el mismo tiene el Gobierno del Estado y la obligación de éste de ponerse amarillo a la brevedad posible.
Ahora falta que patrón, sindicatos y Congreso del Estado se apliquen en serio y a fondo a corregir las graves distorsiones financieras provocadas por el gracioso otorgamiento de altísimas e injustificadas pensiones a poderosos e influyentes burócratas estatales y municipales y de otros poderes como el Judicial del Estado, aunque quienes ya chingaron ya chingaron, pues el nuevo arreglo no es retroactivo.
EL ACABO
✓ Según la Auditora Superior del Estado, Indira García Pérez, los entes públicos adheridos al Sistema de Pensiones del Estado le adeudan a éste 863 millones 505 mil 628 pesos, cantidad que equivale a menos del 20% de lo que se calcula se chingaron Mario Engaños y su pandilla.
✓ Como del mismo cuero que ya no da para más salen todas las correas, deben venir cuanto ahorros reales en el rubro de sueldos, salarios y prestaciones a cargo del gobierno del estado, organismos descentralizados locales y ayuntamientos, pues la economía del estado y sus municipios no aguanta más.